Las sesiones están enfocadas en el marco de la psicología humanista. Veo a la persona de forma holística, como un todo, de manera que mente, emociones, sentimientos, cuerpo,conducta, parte inconsciente… se relacionan entre sí e influyen en la salud mental, física, emocional y espiritual.
Para mí lo más importante es la consciencia de la persona sobre sí misma y su capacidad de darse cuenta.
Confío plenamente en el cambio. En la capacidad de transformación que tenemos como seres humanos y de conectar con los propios recursos para afrontar las dificultades que vayan surgiendo. Confío en el valor de las potencialidades y en que el trabajo de integrar aquellas partes de nosotras que nos gustan menos o que hemos tenido que reprimir es también parte del camino para vivirnos en total plenitud y libertad.
Tu cuerpo es el templo donde habitan tus emociones, esencia, ego, instinto… Así como el lugar en el que quedan registradas aquellas vivencias o emociones no resueltas del pasado en forma de tensiones musculares. Desde esta visión utilizo la Terapia Corporal Integrativa.
Un método de autoconocimiento y transformación que integra la mente, el cuerpo, las emociones, el campo energético y espiritual. Pone el foco en recuperar la energía vital y vivir más desde nuestra parte más esencial y genuina.
Y a través de técnicas corporales, eres más consciente de aquellas sensaciones e impulsos
reprimidos en la niñez. Comprendes tu pasado, que cada emoción tiene una función y que
todo lo no expresado crea una desconexión corporal y estados como la depresión, ansiedad, etc.
Analizas y entiendes tu mente. Tu sistema de creencias, los roles con los que te relacionas…
Inicias un trabajo de despertar potencialidades como el amor, la creatividad, la espontaneidad, la sabiduría interna.
Trabajas la autoaceptación de todo lo que eres, de tus luces y tus sombras.
La Terapia Gestalt la utilizo como base del trabajo terapéutico. Pongo el foco en lo que está sucediendo en el aquí y ahora. Parto de la mirada de lo que está pasando en el presente, sin dejar de lado el pasado y la historia de la persona. Trabajo con el concepto gestáltico del “darse cuenta” (tomar consciencia o percatarse) poniendo atención a los procesos internos: Cómo percibimos la realidad, los impactos emocionales, cómo actuamos, qué sentimos y pensamos, etc.
Por otro lado, la aceptación de la responsabilidad toma también lugar en el proceso terapéutico, teniendo en cuenta la importancia de responsabilizarse de todo lo que nos sucede en la vida: Las acciones, pensamientos, logros, decisiones, “fracasos”, etc. Sólo así se pueden generar cambios y aumentar el poder personal.
Entras en contacto con quien eres realmente. Con cuáles son tus necesidades, emociones y sentimientos reales. Cuáles son tus fortalezas y tus áreas de mejora.
Conectas con tus herramientas necesarias para crecer personalmente, para incrementar tu satisfacción y tu bienestar.
Mejoras en el aspecto relacional, en la relación contigo mismo/a y con el mundo.
Incrementas la comprensión del porqué sufres.
La psicología de los eneatipos (Eneagrama) consiste en el estudio de los 9 diferentes carácteres, considerándolo un mapa de nuestro mundo interno (mental, emocional y corporal). Es una gran vía de trabajo interior, que ayuda a trabajar, entre otros, los comportamientos y actitudes que te limitan o que son insanos, para desandar el camino y volver a tu seresencial.
Durante los primeros años de vida, escondemos nuestro ser verdadero para que este no quede dañado y para que nos quieran y acepten. Esto hace que creamos una máscara o un “ego”,desconectándonos de nosotro/as mismo/as.
Aprendes a comprenderte y a aceptarte. Y, por ende, a comprender y a aceptar a los demás, desarrollando la compasión y la autocompasión. Al describir los rasgos, las fortalezas y áreas de mejora de cada eneatipo (carácter), vas viendo cuál puede ser el tuyo para empezar a trabajar en ti mismo/a.
Promueves la autoobservación, siendo más consciente de tus propios patrones o conductas automáticas. Ir quitando capas para llegar a quien eres realmente.
Adquieres comprensión sobre tu historia personal.
La música es un elemento transformador y una gran vía de entrada al inconsciente. La Musicoterapia -concretamente la audición musical o musicoterapia receptiva- es un recurso
que utilizo en ocasiones en las sesiones para profundizar en la consciencia.
La musicoterapia receptiva consiste en recibir música con una finalidad terapéutica. Según qué tema me trae la persona y según también si quiere utilizar este recurso, escojo una música especial para trabajar ese tema realizando una relajación previamente. El fin siempre es estimular el inconsciente, la introspección y la expresión emocional.
Estimulas la consciencia emocional y el desarrollo de los sentimientos.
Mejoras el estado de ánimo y la autoestima.
Puedes activar diferentes áreas cerebrales simultáneamente, así como ser inducido/a a estados profundos de relajación.
Promueve el autoconocimiento.
Puedes contactar por email a elena.mateu.l@gmail.com,
por whatsapp,
llamando al 636884353 o bien pedir cita directamente desde la web.